DECLARACION DOCTRINAL DE REECA 1330 AM

REECA PERTENECE A LAS IGLESIAS EVANGELICAS CENTROAMERICANAS DE HONDURAS (ASIECAH) Y TIENE COMO BASE PRICIPIOS DE FE BASADOS EXCLUSIVAMENTE EN LA BIBLIA. A CONTINUACION LOS PRINCIPIOS DE FE EN LOS CUALES CREEMOS:

Declaración Doctrinal

1. LAS ESCRITURAS

Creemos que las Escrituras del Antiguo y Nuevo Testamento son inspiradas verbal y plenariamente por Dios,

y son infalibles en los escritos originales, de autoridad suprema y final en todos los asuntos de vida y fe. 2

Ti. 3:16-17; 2 Pe. 1:20, 21; Tit. 1:9; 1 Ped. 1:23.

2. LA TRINIDAD

Creemos que hay un Dios que existe eternamente en tres personas iguales: el Padre, el Hijo y el Espíritu

Santo. Dt. 6:4; 1 Ti. 2:5; 1 Co. 8:6; 1 Ti. 1:17; Jn. 15:26; Mt. 28:19; 2 Co. 13:14., Jn. 10: 30.

3. EL HIJO DE DIOS

Creemos que Dios el Hijo se encarnó en la persona de Jesucristo, que fue concebido por el Espíritu Santo y

nació de la virgen María, y que Él es verdadero Dios y verdadero hombre. Mt. 1:18-20; Lc. 1:35; Jn. 1:1-14; 1

Ti. 3:16; Hch. 7:26., Fil. 2: 6,7.

4. LA OBRA DE CRISTO

Creemos que el Señor Jesucristo murió por nuestros pecados, según las Escrituras, como sacrificio

sustitutorio, y que todos los que en Él creen son justificados por medio de la sangre que Él derramó. 1 Ti.

2:6; 1 P. 3:18; 1 Co. 15:3-6; 1 Jn. 2:1; Hch. 7:25.

5. MINISTERIO DE CRISTO

Creemos en la resurrección corporal de Jesucristo, en su ascensión al cielo, y en su ministerio actual allí

como pontífice, intercesor y abogado. Jn. 5:28-29; 1 Co. 15:51-52; 2 Co. 5:1-8; Fil. 1:23; Ap. 20:11-15.

6. SEGUNDA VENIDA DE CRISTO

Creemos en la venida personal, corporal, visible y premilenial de nuestro Señor Jesucristo en la gloria de su

Padre para establecer sobre la tierra un reino en el cual Él reinará con justicia y paz. Hch. 1:11; Jn. 14:3; 1

Ts. 4:15, 17; Ap. 3:10; 11:15; 19:11-16; Dn. 2:44.

7. EL ESPÍRITU SANTO

Creemos que el Espíritu Santo es una persona, poseedora de todos los atributos divinos. Él es Dios. Él

convence al mundo de pecado, de justicia y de juicio. Él regenera, sella y separa al creyente a una

vida santa. En la regeneración, Él bautiza al creyente en el cuerpo de Cristo y viene a habitarle

permanentemente. Jn. 16:7-11; Ef. 4:30; Ro. 8:9; 1 Co. 12:13; Gá. 5:16.

8. EL HOMBRE

Creemos que el hombre fue creado a imagen de Dios, que él pecó y así incurrió no solamente en el castigo de

la muerte física sino también en el de aquella muerte espiritual que es separación de Dios; que todos los

humanos nacen con una naturaleza pecaminosa, y en el caso de los que alcanzan la edad de la responsabilidad

moral, se hacen pecadores en pensamiento, palabra y hecho. Gn. 1:26; Ro. 3.23; 5:12; 6:23; Gá. 5:17-21.

9. LA SALVACIÓN

Creemos que todo hombre que mediante la fe, aparte de cualquier obra humana, recibe al Señor Jesucristo

como Salvador, es nacido de lo alto, llegando a ser hijo de Dios, creado en Cristo Jesús para buenas obras.

1 Co. 1:2; Ro. 6:6, 11-13; Gá. 5:16; Ef. 1:7; 4:30; 1 Ts. 5:23; 1 Jn. 3:2.

10. LA SEGURIDAD DEL CREYENTE

Creemos que todos los redimidos son guardados en el poder de Dios mediante el renacimiento, la morada y

el sello del Espíritu Santo y la intercesión de Cristo por los suyos. Jn. 1:12-13; Ro.3:21-28; 8:1, 29-30, 34; 2

Co. 5:17; Ef. 2:8-10; 1 Jn. 5:11-12.

11. LA VIDA VICTORIOSA

Creemos que todos los nacidos poseen en esta vida la naturaleza caída de Adán, pero que Dios hizo provisión

amplia, por la cual sus hijos pueden ser más que vencedores mediante el Señor Jesucristo por el poder de su

Espíritu Santo que habita en cada uno de ellos. Rom.5:12; 1 Co. 10:13.

12. DIOS Y LA ENFERMEDAD

Creemos que Dios sana las enfermedades físicas en contestación a la oración de fe con medios o sin ellos,

según sus propósitos y voluntad soberana, y que la curación no puede demandarse sobre la misma base

incondicional de fe, tal como demanda la salvación. El hecho de que Dios no sana en toda ocasión no indica

necesariamente que haya incredulidad o pecado en la vida del creyente.

13. LA IGLESIA

Creemos que la Iglesia, en su forma invisible, es universal, el verdadero cuerpo y la esposa de Cristo, y que

son miembros de ella todos los que han nacido de nuevo por encima de cualquier afiliación eclesiástica. 1 Co.

12:13; Ef. 1:22-23; La iglesia local es un grupo de personas que han hecho profesión de fe en Jesucristo y

se han bautizado y organizado para cumplir con los propósitos del Señor. Mt. 28: 19-20, Efe. 4: 12- 16, I

Tim. 3: 1- 7 , Tito 1: 5- 9.

14. LAS ORDENANZAS

Creemos que Cristo ordenó la celebración del bautismo con agua y la cena del Señor hasta su regreso. Hch.

2:41; 11:15-16; Mt. 28:19-20; 1 Co. 11:23-25.

15. LA RESURRECCIÓN

Creemos en la resurrección de los muertos: justos e injustos. Los primeros son para bendición eterna y los

últimos para perdición eterna. Los que mueren en Cristo pasan inmediatamente a la presencia del Señor, y

sus cuerpos serán levantados en el día de la resurrección. Jn. 5:28-29; 1 Co. 15:51-52; 2 Co. 5:1-8; Fil. 1:23;

Ap. 20:11-15. I Tes. 4: 13- 18.

16. SATANÁS Y LOS ÁNGELES

Creemos en la existencia y personalidad de los seres angelicales: los ángeles no caídos y los caídos. Los

ángeles no caídos sirven a Dios en el cumplimiento de sus propósitos. Los ángeles caídos, Satanás y sus

demonios, se oponen a Dios. Fueron vencidos por Cristo en la cruz y tendrán su fin en el lago de fuego.

Heb. 1:7, 14; Ap. 12:9; Col. 2:15; Mt. 25:41.